Publicado hace 8 horas y 38 minutos
Dame la orden. Ordéname cómo arrodillarme, cómo abrir las piernas, cómo tragártela hasta el fondo. Me derrite obedecer, pero me enloquece que me folles como a una cualquiera. Sin miramientos. Sin pausas. Solo con rabia y placer. Soy tu sumisa perfecta, sin filtros y sin miedo.