Publicado hace más de un mes
Soy adicta al control masculino. Quiero que me pongas contra la pared, que me folles con rabia, que me uses como tu objeto de placer. Mírame a los ojos mientras me dices que soy tuya. Ordéname cómo chuparla, cómo moverme, cómo corrérmela. Me encanta obedecer y aún más... cuando me castigan por no hacerlo. ¿Quieres una perra entrenada para tus juegos más oscuros? Aquí la tienes, mojada y esperándote.