Publicado hace más de un mes
Haz que mis piernas tiemblen. Que me corra varias veces. Que grite tan fuerte que me oigan los vecinos. Usa mi cuerpo sin preguntar. Métela en mi boca, en mi coño, en mi alma. Soy una sumisa nata, adicta al dolor que da gusto, a la humillación que excita, al sexo real y sucio. Te estoy esperando... desnuda y obediente.