Publicado ayer a las 04:27
Hay deseos que no se apagan, solo esperan el momento adecuado para despertar. En un ambiente íntimo y cuidado, mi presencia se convierte en una invitación constante a sentir sin reservas. Cada instante se construye con paciencia, dejando que la conexión crezca de manera natural. Aquí, el placer no es apresurado, se disfruta lentamente, permitiendo que cada sensación se quede contigo más tiempo del que imaginas.
